26/9/10

PEPE BLANCO NO ENTIENDE

Al pobre hombre no le alcanzan las luces para entender los motivos de la huelga del 29. Se lo explico muy fácilmente, renuncie usted a su acta de diputado y demás puestos políticos que le generen ingresos y futuras pensiones y póngase a trabajar en una fábrica o en una comercializadora con uno de esos contratos que según usted son tan buenos.

Desgraciadamente Blanco no está entre los millones de ciudadanos europeos que, rechazando la chinanización mundial, quieren que Europa siga exportando derechos humanos y no que importe esclavitud.

Los europeos comenzamos a estar más que hartos de que los políticos estén cobrando por un trabajo que no hacen. Deberían de estar defendiendo nuestros derechos y no vendernos al mejor postor. No hacen nada para que en China y en otros países dejen de hacer trabajar a la pobre gente en condiciones infrahumanas.

El dragón está engordando porque nosotros le estamos dando de comer pero no estamos educando al monstruo. Todos le compramos, Alemania le está “amueblando” las fábricas (que la maquinaria buena que tienen es alemana), el combustible del transporte aéreo está exento de impuestos (votado por los diputados socialistas de esta legislatura), sus barcos viajan sin control sanitario (da igual que venga el mosquito tigre, el del dengue o el mejillón cebra), les toleramos que maten jóvenes en una plaza, que vendan los riñones de los condenados a muerte, que contaminen, que no tengan casi ningún día de descanso al año … da igual. Y creo que va siendo hora de dejar de contar maravillas de gente como el dueño de Zara que se ha forrado a base de vender ropa hecha en China a precios europeos. Para venderla tan cara para eso que la hubiera hecho hacer en algún país de nuestro entorno. Así que el listo de él se ha hecho supermillonario.

No tengo nada contra los chinos, me caen simpáticos y admiro su cultura milenaria llena de sabiduría, inteligencia y sentido común pero estoy en contra de las dictaduras y el pueblo chino está padeciendo una dictadura severísima (mucho peor que la que hemos sufrido con Franco) y deberíamos ayudarles sin seguir la corriente a los capitalistas que se están aprovechando de esta pobre gente.